Han pasado menos de dos semanas desde que surgieron las graves noticias sobre que Facebook permitió que una empresa llamada Cambridge Analytica pudiera investigar comercialmente los datos de 50 millones de sus usuarios.

A partir de esto, muchos hablaron de eliminar las cuentas de Facebook. Antes de eliminar una cuenta, existe la opción de descargar todos los datos que Facebook dispone de esa cuenta.

Mat Johnson, un usuario de Houston, echó un vistazo a esa información, y después tuiteó un descubrimiento inesperado en su archivo.

Oh wow my deleted Facebook Zip file contains info on every single phone cellphone call and text I made for about a year- cool totally not creepy.

— Mat Johnson (@mat_johnson) March 23, 2018

Primero el seguimiento invisible de los visitantes de Internet, luego el cuestionable data mining y ahora la recolección de llamadas y mensajes, algo (juzgando la reacción en Twitter) que no muchos usuarios de Facebook pensaban que la empresa tenía una razón para realizar.

Un nuevo elemento que encaja dentro un patrón sospechoso.

¿De verdad?

Facebook respondió que registrar las llamadas telefónicas y los mensajes de texto es algo que se permite expresamente al descargar la app de Facebook en Android.

Los usuarios tienen la opción de no permitirlo pero reduciría las posibilidades de Facebook Messenger o Facebook Lite en Android de conectar con tus amigos o recomendar a nuevos el servicio, según declara la empresa. Además aseguran que nunca venden esos datos y esta opción no recoge el contenido de las llamadas o textos.

En defensa de Facebook, esto parece razonable, aunque es interesante que la versión para iOS no permita el acceso a este tipo de información.

Al estar sus usuarios cada vez más preocupados con lo que ocurre con los datos personales en Facebook, está claro que muchos han comenzado a negar permisos que habían otorgado sin pensarlo dos veces.

Por supuesto que Facebook no es la única compañía cuyo modelo de negocio implica ver lo que sus usuarios hacen, a donde van, lo que compran y lo que saben. Muchas otras empresas lo hacen, y también un creciente número de gobiernos, según ellos en nuestro beneficio.

Pidiendo prestada la fábula, cuando pones a hervir una rana no le dices que está planeando subir la temperatura del agua, y aunque no hay nada que impida a la rana saltar fuera nunca lo hace hasta que es demasiado tarde.